Es una remembranza del viaje de estudios por el mundo que hicieron en el año 1972,  al recibirse, los estudiantes universitarios de la Facultad de Ingeniería Química UNL,  en su edición COVEIQ XII. Entre ellos se hallaba el autor, quien se recibía por ese entonces como ingeniero químico.

Recordemos que COVEIQ era el Centro Organizador Viajes de Estudios de Ingeniería Química, auspiciado por la Facultad, e integrado por los propios alumnos que colaboraban en pos del objetivo común (el viaje al extranjero) con mayores responsabilidades para los del último año, próximos a graduarse en sus respectivas carreras universitarias.

El relato es ágil y minucioso, fruto de una muy fluida redacción, estilo al que nos tiene acostumbrados el distinguido profesional y docente universitario.

La narración se ve matizada por anécdotas del viaje, que amenizan el texto haciendo interesante y llevadera la lectura, no solo para los que realizaron el extenso periplo y quieran repasar con otros ojos los pormenores de la travesía, sino para los lectores en general.

El amplio recorrido se extendió por Estados Unidos de Norteamérica, Europa Occidental, Europa Oriental y la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), utilizando medios aéreos, terrestres y acuáticos. La visita incluyó museos, monumentos, lugares históricos, instituciones y establecimientos públicos y privados, constituyendo un valiosísimo aporte a la capacitación pos universitaria de quienes se estaban asomando al comienzo de la vida profesional.

La obra culmina en forma original, con un anexo que da noticia actual del  grupo de colegas y familiares que perdura unido –con las lógicas bajas- a pesar de los años por un sólido vínculo de camaradería y amistad, el cual se mantiene activo llevando a cabo reuniones, viajes, y en definitiva, celebrando la vida.